Descubre el arte de vivir despacio: Incorpora el slow life en tu día a día

Descubre el arte de vivir despacio: Incorpora el slow life en tu día a día

Pausando el frenesí...

Hace unos días me puse a reflexionar sobre el slow life y el slow movement después de darme cuenta que estaba cayendo en el frenesí de una vida acelerada y sin resultados, con la falsa idea en la cabeza de que, si no trabajas duro, si no estas ocupado todo el día y no das rápido el ancho en productividad eres un fracasado o eres una persona mediocre.

 

Esta idea me hizo olvidarme de disfrutar los procesos, cuando los procesos son lo que realmente vivimos, lo que realmente nos enseña, lo que nos hace estar presentes, lo que nos hace conectar con nosotros mismos, con las personas y con nuestro contexto.

 

No estoy hablando de trabajar menos, hablo de hacerlo con excelencia aunque tardemos más tiempo en concluir, haciendo las cosas reflexionadas y con propósito.

 

asomada por la ventana del carro

Foto Averie Woodard

 

El movimiento slow comenzó en 1986 como una protesta en Italia para defender la gastronomía local en contra del fast food. El movimiento no solo se reveló ante la idea de la comida rápida, si no ante la obsesión de querer acelerar el ritmo de cualquier actividad humana. Reflexiona que cada cosa tiene su debido  tiempo de desarrollo, para hacer las cosas al ritmo adecuado.

Ni más lento, ni más rápido y tampoco frenarlo.

 

Esta filosofía de vida trae muchos beneficios si los aplicamos en nuestra vida y este cambio también es poco a poco. Yo me he dado cuenta que es aplicable a todo lo que vivimos, también es aplicable si vivimos en la cuidad o en el campo, si trabajamos en nuestra casa, en una oficina o nos vamos moviendo de lugar.

Podemos cuestionarnos sobre los productos que consumimos, sobre nuestras relaciones, sobre las sensaciones de lo que vamos viviendo, de pararnos unos minutos a disfrutar nuestro café, a dedicarle tiempo consiente a resolver mejor al diseño que estamos por presentarle a un cliente, en investigar más a fondo sobre cualquier proyecto para ofrecer calidad.

 

manos sembrando

                            Foto Gabriel Jimenez

Viviremos congruentemente con nosotros mismos, cuidando nuestras relaciones y cuidando al planeta.

¡Cuéntame en los comentarios tu opinión sobre este artículo escrito por un Nativer!

-bees&love-

 

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